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La conciencia social comunista

Virgen de Guadalupe

Corazón de Jesús

El Gran Milagro

Infiltración en la Iglesia

El Reino de la Paz

«Yo diría que, en el fondo, es un problema de pecado. Desde hace unos cuantos años, la Argentina vive una situación de pecado, porque no se hace cargo de la gente que no tiene pan, ni trabajo. La responsabilidad es de todos. Es mía, como obispo. Es de todos los cristianos. Es de quienes gastan el dinero sin una clara conciencia social» (El Jesuita – pag 105). Así habla un comunista en la Iglesia.

Gastar el dinero sin una clara conciencia social: Ya no existe el pecado de avaricia, de codicia, de usura, de egoísmo, de idolatría del dinero, sino sólo hay que ver la conciencia social: vives para los problemas de la gente o vives sólo para tus problemas.

No existe el pecado, sino los problemas. Y, entonces, claro, los países viven una situación de pecado, porque no toman conciencia social.

La Jerarquía del demonio siempre habla como Francisco: lleva a la calle, al mundo; pone al hombre como el centro de todo.

«Creo en el hombre. No digo que es bueno o malo, sino que creo en él, en la dignidad y la grandeza de la persona» (El Jesuita – pag 160). Creo en el hombre, pero no en Dios.

Y, por eso, continúa: «hay gente que pasa hambre. Esto revela una falta de conciencia social. Cuanto mucho unas pocas veces damos una limosna, incluso, sin mirar a los ojos a los pobres, como una forma de lavar culpas» (El Jesuita – pag 106).

Está atacando directamente la doctrina católica sobre la limosna, que expía los pecados. Ataca a la Palabra de Dios: «Buena es la oración con el ayuno, y mejor la limosna que acumular tesoros de oro; porque la limosna libra de la muerte, y es ella que borra pecados y hace hallar misericordia y vida eterna» (Tb 12, 8-9)

No laves tus culpas haciendo limosnas de vez en cuando, tienes que tener una conciencia social. Déjate del pecado, de su expiación, de la salvación del alma. Llena el estómago de una gente que pasa hambre y te vas cielo directamente:

«es un deber compartir la alimentación, el vestido, la salud, la educación con nuestros hermanos. Algunos podrán aseverar: “¡Qué cura comunista éste!”. No, lo que digo es Evangelio puro. Porque, ojo, vamos a ser juzgados por esto. Cuando Jesús venga a juzgarnos le va a decir a algunos: “Porque tuve hambre y me diste de comer, tuve sed y me diste de beber, estaba desnudo y me vestiste, estuve enfermo y me visitaste.” Y, entonces, se le preguntará al Señor: “¿Cuándo hice esto porque no me acuerdo? Y el responderá: “Cada vez que lo hiciste con un pobre lo hiciste conmigo.” Pero también le va a decir a otros: “Váyanse de acá, porque tuve hambre y no me dieron de comer.” Y, también, nos reprochará el pecado de haber vivido echándole la culpa por la pobreza a los gobernantes, cuando la responsabilidad, en la medida de nuestras posibilidades, es de todos» (El Jesuita – pag 107).

Así interpreta este hombre el pasaje sobre el Juicio Final: en clave comunista: has dado de comer, al cielo. No has dado de comer, al infierno.

¡Si el juicio final fuera así de sencillo, entonces no habría ese juicio, porque todos se iban a salvar. ¿Quién no ha dado una comida a un pobre? Cualquier hombre ha hecho eso. Pero la cuestión no está en dar la comida o en no darla. La salvación está en dar de comer como lo hizo Cristo. Y la condenación está en dar de comer como lo hacen los hombres. Cristo, para dar algo material, primero enseña y da lo espiritual: «Buscad primero el Reino de Dios y los demás por añadidura». En este pasaje el Señor enseña la caridad del prójimo por amor a Él. Francisco enseña la caridad del prójimo por amor al prójimo. Enseña su comunismo: la conciencia social.

«Si bien en la doctrina del marxismo, tal como es concretamente vivido, pueden distinguirse estos diversos aspectos, que se plantean como interrogantes a los cristianos para la reflexión y para la acción, es sin duda ilusorio y peligroso olvidar el lazo íntimo que los une radicalmente, el aceptar los elementos del análisis marxista sin reconocer sus relaciones con la ideología, el entrar en la práctica de la lucha de clases y de su interpretación marxista, omitiendo el percibir el tipo de sociedad totalitaria y violenta a la que conduce este proceso» (Pablo VI).

No see puede ser marxista sin amar su ideología; no se puede predicar la teología de los pobres y no ser marxista en la ideología. Quien ama el comunismo quiere una sociedad y una Iglesia totalitaria y violenta.

Francisco quiere una Iglesia comunista:

—«¿Usted quiere decir que no hubo una condena en bloque como suele pensarse popularmente?»

—«Claro. Tampoco hablaría de una condena en el sentido legal de ciertos aspectos, sino de una denuncia. La opción preferencial por los pobres es un mensaje fuerte del post concilio. No es que no haya sido proclamado antes, pero el post concilio lo enfatizó. La mayor preocupación por los pobres que irrumpió en el catolicismo en los años sesenta constituía un caldo de cultivo para que se metiera cualquier ideología. Esto podría llevar a que se desvirtuara algo que la Iglesia pidió en el Concilio Vaticano II y viene repitiendo desde entonces: abrazar el camino justo para responder a una exigencia evangélica absolutamente insoslayable, central, como la preocupación por los pobres, lo que a mi juicio aparece maduro en la conferencia de obispos de Aparecida» (El Jesuita – pag. 82-83).

La Congregación para la Doctrina de la Fe, Libertatis Nuntius, condenó los desvíos de la teología de la liberación:

«La presente Instrucción tiene un fin más preciso y limitado: atraer la atención de los pastores, de los teólogos y de todos los fieles, sobre las desviaciones y los riesgos de desviación, ruinosos para la fe y para la vida cristiana, que implican ciertas formas de teología de la liberación que recurren, de modo insuficientemente crítico, a conceptos tomados de diversas corrientes del pensamiento marxista (…)obedece a la certeza de que las graves desviaciones ideológicas que señala conducen inevitablemente a traicionar la causa de los pobres» (Declaracion).

Se pone la atención sobre aspectos ruinosos para la fe y la vida cristiana. No es sólo una denuncia de algo que está mal; es una condena de la teología de la liberación que sigue la ideología marxista. Porque hay una teología católica de la liberación, que no tiene nada que ver con lo que propone esta teología de los pobres, que «está enraizada en la Palabra de Dios, debidamente interpretada» (Ibidem).

El Concilio Vaticano II no dio ningún mensaje fuerte sobre la opción por los pobres, porque en la Iglesia no existe esta opción. En la Iglesia ni se opta por los pobres ni por los ricos. La opción por los pobres es el lenguaje propio del marxismo, de la ideología marxista. No es el lenguaje propio de un católico. El católico en la Iglesia sólo mira a Cristo y sólo elige a Cristo. Lo demás, es marxismo.

«El presente documento sólo tratará de las producciones de la corriente del pensamiento que, bajo el nombre de «teología de la liberación» proponen una interpretación innovadora del contenido de la fe y de la existencia cristiana que se aparta gravemente de la fe de la Iglesia, aún más, que constituye la negación práctica de la misma» (Ibidem). Es claro que es una condena de esta teología: lo que se aparta gravemente de la de la Iglesia es para ser condenado, no para hablar de ello, no para ser denunciado de alguna manera.

«Préstamos no criticados de la ideología marxista y el recurso a las tesis de una hermenéutica bíblica dominada por el racionalismo son la raíz de la nueva interpretación, que viene a corromper lo que tenía de auténtico el generoso compromiso inicial en favor de los pobres» (Ibidem). La teología de la liberación se apoya en una filosófica condenada por la Iglesia (el Racionalismo), que corrompe el significado de los pobres en la Iglesia por basarse sólo en la idea racional del pobre, anulando la idea evangélica que Cristo predicó.

El Papa Bendicto XVI recordando esta condena, dijo que «en ella se subrayaba el peligro que implicaba la aceptación acrítica, por parte de algunos teólogos, de tesis y metodologías provenientes del marxismo. Sus consecuencias más o menos visibles, hechas de rebelión, división, disenso, ofensa y anarquía, todavía se dejan sentir, creando en vuestras comunidades diocesanas un gran sufrimiento y una grave pérdida de fuerzas vivas». (Documento)

—«Entonces ¿considera que hubo teólogos de la liberación que equivocaron el camino?»

—«Desviaciones hubo. Pero también hubo miles de agentes pastorales, sean sacerdotes, religiosos, religiosas, laicos jóvenes, maduros y viejos, que se comprometieron como lo quiere la Iglesia y constituyen el honor de nuestra obra, son fuente de nuestro gozo. El peligro de una infiltración ideológica fue desapareciendo en la medida en que fue creciendo la conciencia sobre una riqueza muy grande de nuestro pueblo: la piedad popular. Para mí lo mejor que se escribió sobre religiosidad popular está en la exhortación apostólica de Paulo VI Evangelii Nuntiandi y lo repite el documento de Aparecida en lo que es para mí su página más bella. En la medida, pues, en que los agentes pastorales descubren más la piedad popular la ideología va cayendo, porque se acercan a la gente y su problemática con una hermenéutica real, sacada del mismo pueblo» (El Jesuita – pag. 82-83).

Desviaciones hubo, pero no equivocaron el camino. Hubo cantidad de gente que se comprometieron con el marxismo: son fuente de nuestro gozo. La ideología marxista decreció porque existió la conciencia de la piedad popular. ¡Terrible herejía la que manifiesta este hombre! El error sólo se combate con la verdad. Si la teología de la liberación ha decaído es porque se ha dicho la Verdad, no porque se dé una conciencia que no existe.

La conciencia de la piedad popular es el creacionismo o evolucionismo, que es puro comunismo: «En la medida, pues, en que los agentes pastorales descubren más la piedad popular la ideología va cayendo, porque se acercan a la gente y su problemática con una hermenéutica real, sacada del mismo pueblo». Esto se llama populismo, que es una vertiente del marxismo. La fe está en el pueblo, no en la Jerarquía. Hay que interpretar el Evangelio según la sabiduría popular, no según la sabiduría divina, que es dada a la Jerarquía, que la tienen los Obispos y sacerdotes en el Poder Divino que se les confiere en la ordenación: guiar, enseñar y santificar. El pueblo no sabe nada, no enseña nada, no es guía de nada. Es la Jerarquía la que tiene la sabiduría, el poder, el camino para santificar.

Los problemas de la gente no son los problemas de la Iglesia, no son los problemas de Cristo. Cristo viene a salvar al hombre, no viene a resolver problemas de la gente. Y, por eso, Cristo pone a sus sacerdotes para llevar a las almas al Reino de Dios, que no pertenece al pueblo, no es de este mundo, no está mirando, no está abocado a resolver los asuntos de los hombres, que es lo que busca la teología de la liberación. Del pueblo no se saca nada. Es del Corazón de Cristo donde se saca la Verdad, la Vida y la Gracia para el pueblo, para los hombres.

• Francisco es un revolucionario comunista, que aprendió el comunismo de una mujer:

«Allí tuve una jefa extraordinaria, Esther Balestrino de Careaga, una paraguaya simpatizante del comunismo (…) Me enseñaba la seriedad del trabajo. Realmente, le debo mucho a esa gran mujer» (El Jesuita – pag 34). «Tanto me enseñó de política» (pág. 147-148).

Una mujer (vida) que luchó por una idea revolucionaria toda su vida (tempranamente comenzó a militar en el febrerismo, movimiento de fuerte tinte socialista, con un programa antiimperialista, de liberación nacional) y que, cuando se encontró con el dolor en su vida (el 13 de septiembre de 1976 fue secuestrado su yerno, Manuel Carlos Cuevas, marido de su hija Mabel. Otro 13, esta vez de junio del 77, fue secuestrada su hija menor, Ana María, en ese entonces de apenas 16 años y embarazada de tres meses), decidió transformar ese dolor en odio hacia la verdad. No supo aceptar ese sufrimiento por amor a Dios, sino que fundó un movimiento que habría de convertirse en un símbolo mundial de lucha y resistencia: las Madres de Plaza de Mayo (texto).

Esta mujer, que desapareció y finalmente fue asesinada por la dictadura del General Videla, «Actualmente, está enterrada en la iglesia de Santa Cruz. La quería mucho» (El Jesuita – pag 34).

¿Qué hace una terrorista enterrada en una Iglesia Católica? ¿No hay cementerios comunes para esta clase de personas?

«Se han de negar las exequias eclesiásticas, a no ser que antes de la muerte hubieran dado alguna señal de arrepentimiento:

1. a los notoriamente apóstatas, herejes o cismáticos;

2. a los que pidieron la cremación de su cadáver por razones contrarias a la fe cristiana;

3. a los demás pecadores manifiestos, a quienes no pueden concederse las exequias eclesiásticas sin escándalo público de los fieles» (CIC 1184).

Esta mujer, ¿mostró alguna señal de arrepentimiento? ¿Dejó sus ideas marxistas, revolucionarias, para solo luchar por Cristo? Ciertamente que no. Y, entonces, Francisco cometió un grave sacrilegio y una profanación del lugar sagrado. E hizo este pecado sólo por su amor al comunismo, que le ciega para ver la Verdad.

Francisco cuenta la profanación como un logro y una fiesta. Francisco lloró (noticia) cuando el cuerpo de esta mujer fue encontrado e hizo todas las diligencias para que fuese enterrada en el jardín de la Iglesia Santa Cruz (noticia), junto a María Ponce de Bianco, una de las tres madres secuestradas con ella. Con posterioridad también fueron sepultadas allí la Hermana Léonie Duquet y la activista Ángela Auad (activista social argentina del Partido Comunista Marxista Leninista, que actuaba con la asociación de las Madres de Plaza de Mayo).

Su hija la recuerda de esta manera: “Gracias por la ideología que no abandonaste en los momentos aún más difíciles. Gracias por el anhelo de justicia e igualdad social que supiste transmitirnos. …además de una revolucionaria con mayúsculas, fuiste una gran madre” (noticia)

Francisco le debió mucho a esta mujer, a esa ideología marxista que le enseñó y que nunca más abandonó Francisco; y, por eso, la enterró en una Iglesia. Quien ama el pecado obra el pecado. Quien ama la idea comunista, obra como tal. Ya no sabe discernir lo que es bueno y lo que es malo. Sólo vive para los hombres y mujeres comunistas, pero no para los demás.

Y ¿en qué se basa Francisco para obrar así? En su teología de la liberación. Para esta teología el compromiso de Jesús con los oprimidos de su tiempo provocó un enfrentamiento con los poderes religiosos-políticos y económicos que lo llevó a la muerte. Jesús es un hombre revolucionario que trabaja por la idea del hombre, la idea de los pobres, oprimidos por el hombre, esclavos de los hombres.

Y, entonces, Cristo muere porque los hombres se oponen a esta idea. Cristo trajo una idea revolucionaria al hombre y murió por esa idea. Para la teología de la liberación, María se convirtió en hija de su hijo; es decir, que María, una vez que fue asesinado su hijo en la cruz, tomó conciencia y se comprometió en la idea revolucionaria de su hijo: hay que luchar por los oprimidos, por los desaparecidos, por los perseguidos por la justicia de los hombres. Y, por eso, se reúne con los Apóstoles para iniciar la iglesia de la revolución. Por eso, las Madres de Plaza de Mayo están haciendo lo mismo que hizo María: luchando por sus hijos y, de esa manera, están obrando el Reino de Dios, es decir, creando una sociedad igualitaria, justa y fraterna.

Y, entonces, se entierra a las madres comunistas, revolucionarias, en la Iglesia porque han trabajado por el Reino de Dios, por una sociedad de amigos comunistas. Grave profanación de la Iglesia Católica a manos de un Obispo comunista.

«Hay también quienes ven actitudes de revanchismo. ¿Cree que el papel, por caso, de la presidenta de las Madres de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini, ayuda a la búsqueda de la reconciliación?» (El Jesuita – pag 139). La pregunta que le hacen a Francisco es ¿si esta mujer, que es un monumento al odio, sirve para la reconciliación del mundo? Es una pregunta con malicia. Es una pregunta para que se descubra el verdadero pensamiento de Francisco.

Hebe de Bonafini ha apoyado a figuras como el Che Guevara, Augusto Sandino, Yasir Arafat, Fidel Castro, Hugo Chávez y Evo Morales. También ha manifestado apoyo a los aborígenes americanos. Se ha manifestado en contra del neoliberalismo y del FMI, vistos por ella como la «corporación del poder». Ha manifestado su apoyo a las FARC en Colombia (noticia) . Ha manifestado su apoyo a las madres de los presos etarras. En el año 2000 publicó una carta abierta en la página web de la asociación que preside, en la cual expresaba que de los más de 650 presos vascos, muchos están presos simplemente por lo que piensan, o por lo que escriben, o por «conocer a alguien que conoce a alguien» (noticia) .

Sobre los atentados del 11 de septiembre de 2001 declaró (noticia) :

«Cuántas veces nos dijeron qué era el capitalismo, qué era la represión, qué era Estados Unidos, cómo se formaban los militares para torturar. […] Por eso cuando pasó lo del atentado y yo estaba en Cuba visitando a mi hija, sentí alegría. Y me puse contenta, por qué no. A algunos les parecerá mal. Cada uno evaluará y pensará. Yo no voy a ser falsa. Brindé por mis hijos, brindé por tantos muertos, contra el bloqueo, por todo lo que se me venía a la cabeza. Brindé por los valientes. Brindé por los hombres que hicieron una declaración de guerra con el cuerpo. Una declaración de guerra inesperada para todos. Pero una declaración de guerra para algo que EE.UU no puede atacar porque no sabe a quién, ni cómo, ni dónde llegar(…)No voy a ser hipócrita, no me dolió para nada. No me dolió para nada, porque siempre digo en mis discursos, decimos las madres, que nuestros hijos serán vengados el día que el pueblo, algún pueblo sea feliz. […] Yo sentí que la sangre de tantos en ese momento era vengada. […] En ese atentado no murieron pobres, poblaciones, no murieron niños, no murieron viejos».

Esta mujer, que brinda por la muerte, por la guerra, por el odio, por la venganza, ¿ayuda a la reconciliación? Y contesta:

“Hay que ponerse en el lugar de una madre a la que le secuestraron sus hijos y nunca más supo de ellos, que eran carne de su carne; ni supo cuánto tiempo estuvieron encarcelados, ni cuántas picaneadas, cuántos latigazos con frío soportaron hasta que los mataron, ni cómo los mataron. Me imagino a esas mujeres, que buscaban desesperadamente a sus hijos, y se topaban con el cinismo de autoridades que las basureaban y las tenían de aquí para allá. ¿Cómo no comprender lo que sienten?” (pág. 139).

Pongámonos en los sentimientos humanos: de una madre a la que le secuestraron sus hijos y nunca más supo de ellos. Hay que comprender lo que sienten. Y, por tanto, lo que hace es para la reconciliación. Esta mujer se topó con el cinismo de gobiernos que la basureaban. Ellos son los malos de la película, que odian y no permiten la paz. Esta mujer es una santa porque lucha por una idea santa: su hijos.

Esta mujer es una víctima de la sociedad que no comprende su sufrimiento. Esta mujer es la buena; enemiga de todo lo bueno y amiga de todos los malos. A esta mujer hay que dedicarle una palabra de comprensión y de consuelo. A las demás mujeres, católicas, que también han perdido sus hijos, a las mujeres a quienes los seguidores de Bonafini asesinaron a mansalva, nada de nada.

Los buenos, para Francisco son Angelelli, Mugica, los palotinos, las monjas francesas, los curas tercermundistas con el Padre Pepe Di Paola a la cabeza (pág. 106), los grandes heresiarcas “Hesayne, Novak y De Nevares” (pág. 140), los “teólogos de la liberación” que “se comprometieron como lo quiere la Iglesia y constituyen el honor de nuestra obra” (pág. 82), los redactores de “Nuestra Palabra y Propósitos”, publicaciones ambas del Partido Comunista (pág. 48), y hasta el mismísimo Casaroli, a quien insensatamente pone de ejemplo (pág. 78), omitiendo que fue el artífice de aquella siniestra y ruinosa felonía denominada Ostpolitik. Para el Cardenal Mindszenty Casaroli era la imagen negra y enlodada de la “Iglesia de los Sordos”, negociadora ruin de la sangre mártir. Para Bergoglio, Casaroli es un modelo de la “Iglesia Misionera” (pág. 78), iglesia comunista que va en busca de la destrucción de toda idea religiosa.

Francisco encomia a los peores lobos, todos rojos, y reduce a la nada a quienes debería tener por arquetipos.

A esta mujer, que odia a todo el mundo, que se moviliza para protestar, la gloria de la Iglesia, pero a los católicos que hacen una marcha en contra del preservativo los fustiga:

«Dejamos de lado una catequesis riquísima, con los misterios de la fe, el credo y terminamos centrándonos en si hacemos o no una marcha contra un proyecto de ley que permite el uso del preservativo» (El Jesuita – pag 89). Predica el Evangelio, da de comer, pero no te metas con el sexo. Que cada uno haga lo que quiera en el campo sexual:

«Y dentro de la moral —aunque no tanto en las homilías como en otras ocasiones— se prefiere hablar de la moral sexual, de todo lo que tenga algún vínculo con el sexo. Que si esto se puede, que si aquello no se puede. Que si se es culpable, que si no se es culpable. Y entonces, relegamos el tesoro de Jesucristo vivo, el tesoro del Espíritu Santo en nuestros corazones, el tesoro de un proyecto de vida cristiana que tiene muchas otras implicancias más allá de las cuestiones sexuales» (Ibidem).

El Evangelio que predica Francisco no es el de Cristo: es uno sin moral. Jesús no predicó una moral ni para el alma ni para el cuerpo. Jesús predicó una idea política y eso es lo que importa. Lo moral, si esto se puede o no se puede, eso es un dolor de cabeza. Déjate de moralidades, de leyes, de teologías sexuales. Si quieres usar el preservativo, úsalo. Eso no interesa. Lo que interesa es tu conciencia social: acuéstate con un homosexual para hacerle feliz.

“Con ocasión de la llamada Ley de Salud Reproductiva, algunos grupos de élites ilustradas de cierta tendencia querían ir a los colegios para convocar a los alumnos a una manifestación contra la norma porque consideraban, ante todo, que iba contra el amor […] Pero el Arzobispado de Buenos Aires se opuso a que los chicos participaran por entender que no están para eso. Para mí es más sagrado un chico que una coyuntura legislativa […] De todas maneras, aparecieron algunos colectivos con alumnos de colegios del Gran Buenos Aires. ¿Por qué esta obsesión? Esos chicos se encontraron con lo que nunca habían visto: travestis en una actitud agresiva, feministas cantando cosas fuertes. En otras palabras, los mayores trajeron a los chicos a ver cosas muy desagradables” (El Jesuita – pag 90).

Los grupos de élite ilustrada son los católicos pro vida, que querían movilizarse con sus familias para hacer frente a esa embestida legal contra la Ley natural que Ginés González García, Ministro de Salud de Néstor Kirchner quería coronar. Monseñor Baseotto, fue difamado, calumniado y perseguido por haber osado recordarle a este señor las prescripciones evangélicas pertinentes.

Esta embestida legal es para Francisco una coyuntura legislativa, no es una acción pecaminosa, deleznable, ruinosa de la sociedad. Y, por ser eso, entonces no vale la pena movilizar a la juventud. No hay que combatir el error. Es más sagrado el chico que la coyuntura legislativa. Esta es la contradicción. Si no se lucha contra el error, contra la maldad, los chicos se abortan, viven del sexo desenfrenado, viven fuera de lo sagrado. Y, entonces, los malos ya no son los gobernantes, los que ponen esa ley antinatural, sino que los malos son esos grupos de élite ilustrada que permitieron que sus hijos vieran cosas desagradables: travestís, feministas…

¿Es que hay algo más desagradable que pudiera ver un joven, que la ruina de su patria y del lugar santo, sin intentar siquiera una reacción vigorosa y entusiasta? ¿Es que la culpa de la desagradable visión no la tienen los degenerados que arman el espectáculo indecente de su impudicia, sino los que instan a concurrir a todos en defensa del Bien?

Así piensa un comunista: es la conciencia social, no es el pecado. Es lo bueno y lo malo que cada uno ve con su mente humana y en la sociedad. Es inventarse una moral, sin moral, sin ley divina y sin ley natural. Una moral para una sociedad degenerada, que sólo vive de acuerdo a su filosofía de la vida, mirando al hombre, pero sin acordarse, para nada, de Dios.

Quien no ofrenda su vida por Cristo, la hace por el hombre. Y se convierte en una persona totalitaria y violenta, como Francisco. Tuvo su maestro en una mujer violenta, marxista, revolucionaria, que odiaba la verdad en el hombre, que convirtió la vida del hombre en un pasaje oscuro y tenebroso en su mente humana. De tal palo, tal astilla. Así es Francisco: el oscuro comunista que lleva a las almas al fondo del precipicio de donde nadie puede salir.


21 comentarios

  1. Marita dice:

    Y ¿en qué se basa Francisco para obrar así? En su teología de la liberación. Para esta teología el compromiso de Jesús con los oprimidos de su tiempo provocó un enfrentamiento con los poderes religiosos-políticos y económicos que lo llevó a la muerte. Jesús es un hombre revolucionario que trabaja por la idea del hombre, la idea de los pobres, oprimidos por el hombre, esclavos de los hombres.

    Pregunta: ¿Qué diferencia puede haber ante la teología de la liberación de Francisco y su idea del Cristo revolucionario y uno de los tantos discursos de Hugo Chavez y su idea tambien del Cristo revolucionario? Veamos mas abajo si encontramos alguna diferencia:

    Discurso del Cmdte. Hugo Chávez del 19 de Septiembre de 2005. ….Esa es la misma lucha que hoy estamos dando, no es otra, no es otra, es la misma lucha: la injusticia, la desigualdad, el atropello de los poderosos –que son los menos– contra los pobres y los explotados que somos los más en esta tierra, y de ahí los mártires que sacrifican hasta su vida, como Cristo, por los demás y por las luchas y por el ejemplo, y se hacen inmortales, y hay que rendir tributo a ellos por los siglos de los siglos, porque como lo dijo otro mártir, Ernesto Guevara, un día: “El revolucionario ocupa el escalón más alto de la especie humana…” Cristo lo fue, el revolucionario verdadero, hace lo que hace por amor, pero puro amor ….

  2. Estrella dice:

    Solo Dios sabe si soy o no Trigo limpio, que es el Unico que ve el corazon, las intenciones, pensamientos y sabe la vida de cada ser humano. Si Ud es trigo limpio lo felicito!.El que este libre de pecado que tire la primera piedra!. EL UNICO PERFECTO Y SANTO ES DIOS! Pero si es Verdad que hay mucha oscuridad espiritual! O ESTOY DICIENDO MENTIRA ?

    • José Manuel Guerrero dice:

      Usted no sabe si es trigo limpio? Necesita recurrir a Dios para saberlo?. Interesante teorìa.

    • josephmaryam dice:

      Es Dios el que da a conocer el pecado en el interior del alma. Ningún alma por sí misma conoce lo que es si Dios no se lo revela. Por eso, es de sabios pedirle al Señor que nos descubra nuestros más íntimos pecados y miserias que no podemos ver por nosotros mismos. Ver nuestros pecados es una gracia de Dios. Ver el pecado del otro es algo humano y siempre es un error. Nunca hay que juzgar la vida moral de las demás personas porque no conocemos sus intenciones. Sólo juzguen lo espiritual, aquello que nace de su vida espiritual. Y, por tanto, está persona, espiritualmente está en camino hacia la verdad, lucha por ella, pero no sabe aún combatir la mentira adecuadamente. Y eso no significa que sea cizaña. Hay muchas almas que todavía poseen errores, dudas, temores, y son trigo. Pero es un trigo que nace en medio de mucha cizaña. Ser trigo y ser cizaña es una conquista en la vida espiritual, porque todos nacemos en el pecado original, es decir, siendo cizaña para el infierno. Y muchos se quedan como cizaña, pero otros se van transformando en trigo. Una vez que las almas ven la verdad y trabajan para salir de su estado de pecado, entonces es cuando se les puede llamar trigo; pero si el alma viendo la verdad, decide quedarse en el mal, entonces hay que llamarla cizaña.
      No juzguen lo moral, sino lo espiritual. No juzgue la intención de esta alma para conocer la verdad; juzgue el método espiritual como inadecuado para conocer esa verdad y combatir el error.

  3. ana dice:

    Graciasssssssss!era solo q siempre me habia preguntado!!!!!perdoneme con estas absurdas dudas!stamos viviendo tiempos muy dificiles!!!!gracias x todo!!

  4. ana dice:

    A estrella le diria,hay muchas revelaciones,en este blog puede acceder a ellas que sin duda le daran mucha luz

  5. ana dice:

    Padre,perdone que vuelva al tema de La cremacion.ya sabe como muchas veces le he dicho lo que me ayuda!!He entendido su respuesta,pero me quedan muchas dudas.._Que ocurrira con esos cuerpos calcinados?es mas estoy convencida devque a pesar que yo mostrara mi disconformidad,si algo me ocurriera,Dios no lo permita,me cremarian sin dudarlo!!!!

    • josephmaryam dice:

      «Polvo eres, y al polvo volverás» (Gn 3, 19)

      No tenemos el cuerpo glorioso, sino un cuerpo de pecado que debe volver al polvo, del cual fue tomado.
      Por tanto, no se preocupe por su cuerpo lleno de polvo, porque tendrá un cuerpo glorioso, que sólo se hace en el Espíritu, no ya del polvo. Y, por tanto, aunque la cremen, eso no importa para su cuerpo glorioso. El pecado le corresponde al Señor juzgarlo, pero a usted sólo le corresponde no preocuparse por su cuerpo.
      El Señor todo lo transformara con Su Fuego; luego, ¿por qué se angustia por su cuerpo, si usted no sabe nada de su muerte ni de lo que van a hacer con su cuerpo?
      Nada sabe usted de cómo Dios transformará el mundo. No sabe usted cómo esos cuerpos que el hombre ha incinerado, sirven o no sirven a Dios.
      El cuerpo es polvo. Sólo eso.
      El cuerpo glorioso es espíritu y sólo espíritu.
      Lo demás, no se meta en medir lo que no puede medir con su cabeza humana.

  6. Estrella dice:

    Gracias Padre, ya entiendo lo que debo hacer, pero es que EL HUMO DE SATANAS ESTA MUY FUERTE, Y no solo con gente por internet sino con mis propios familiares, que no me creen nada, y me hacen a un lado, porque solo quieren seguir en las cosas del mundo, Y YO LES DIGO QUE VIVEN ES UN CATOLICISMO LAIT, CON UN DIOS A SU MEDIDA, Y ESO LO HE APRENDIDO POR LAS CATEQUESIS QUE OIGO POR INTERNET.

    • José Manuel Guerrero dice:

      Estrella creo que usted no es trigo limpio. No me creo su historia, ni sus palabras. Viene aqui a provocar. Y probablemente salga esquilada. Algo no encaja en su lomo escandalizado. Cuando encuentre las palabras se las diré.

  7. Estrella dice:

    Padre disculpe la molestia, pero necesito que me aclare esto:una persona escribio lo siguiente; Es tambien sorprendente escuchar a algunas personas decir que Alá
    no es el mismo dios catolico o judio. Que vergüenza afirmar tal exabrupto, se sabe que es el mismo Dios , pero hay que estudiar los textos sagrados del Coran para entenderlos y darse cuenta que fue San Gabriel arcangel quien lleva a Mahoma al cielo y ve al Padre junto a Moises , Jesús y otros y le es revelada la grandeza de la virgen Maria.
    Aqui en este blog he escuchado blasfemias contra el Dios de los mususlmanes que es el mismo nuestro .
    Como dice el dicho : LA IGNORANCIA ES ATREVIDA. Lo digo sin ofender, pero por Dios piensen e investiguen antes de insultar y blasfemar contra los dioses de otras religiones, porque en realidad estan blasfemando contra su propio Dios y como dice en la Biblia cualquier pecado contra la carne se les perdonara , pero jamas se les perdonara que blasfemen contra EL ESPIRITÚ.¡¡¡¡ Dios no es propiedad exclusiva de los católicos, ÉL se manifiesta en todas partes en oriente y en occidente, por eso el Papa Francisco quiere crear una sola religion que una a judios, catolicos y musulmanes para empezar.
    Por favor dejen tanta soberbia porque esa actitud no los lleva a ninguna parte.

    Nosotros los humanos somos propiedad de Dios, tanto orientales como occidentales y comprenda y entienda que usted ni nadie es dueño exclusivo de Dios.
    Y por otra parte a nadie le interesa apartarlo a usted de la verdad , que sacariamos con eso????
    NADA.
    Los orientales seguiran amando y venerando a Dios y a su amada madre , gustele o no y eso NO SE PUEDE CAMBIAR.
    Hay fundamentalistas en todas partes , pero los fanaticos son los peores porque generan separación y odio. YO LE RESPONDI ASI: La religion de mahoma viene de los babilonicos, de los egipcios, que adoraban becerros de oro, a los astros, ofrecian sacrificios humanos, pero no adoraban al Dios verdadero, entonces los musulmanes a que dios adoran, acaso no vienen de mahoma? VA A SER ENTONCES EL DIOS DE LOS MUSULMANES IGUAL AL DE LOS CRISTIANOS CATOLICOS?. QUE CONFUSION, COMO QUIEREN ENREDAR, PARA APARTAR DE LA VERDAD. EN ESTE VIDEO SE CONFIRMA VERDADES SI EL DIOS DE LOS MUSULMANES ES IGUAL AL DE LOS CRISTIANOS, O NO Y DONDE DICEN QUE QUIEREN IMPONER UNA SOLA RELIGION, QUE ES LA RELIGION DEL NUEVO ORDEN MUNDIAL, Y POR TANTO DEL ANTICRISTO: MUSULMANES PROFANANDO IGLESIAS CRISTIANAS:

    PERSECUCION A LOS CRISTIANOS:

    Y

    Y LA PERSONA ME VOLVIO A RESPONDER ASI: Cuando usted habla mal de ALA y de los musulmanes , esta blasfemando contra el unico Dios que existe al calificarlo de demonio, es lo mismo que hacen los fanaticos musulmanes con los catolicos ¡¡¡¡
    ENTONCES USTED , NO ES SUPERIOR SINO IGUAL A ELLOS .
    Tambien alla hay gente normal y educada como en todas partes.
    Ser fanatico no es lo que Dios quiere. PADRE POR FAVOR DIGAME QUIEN DICE LA VERDAD, SI EL O YO, EN LO POCO QUE SE, YA QUE TODO ESTO ES NUEVO PARA MI , GRACIAS

    • josephmaryam dice:

      Usted, ¿por qué pierde el tiempo con esta gente?
      Dedíquese a cultivar su fe católica. Está gente está sólo en la idolatría de la mente humana, incapaz de ver, de discernir la verdad. Y, por tanto, se inventa todo con su cabeza y coge, de aquí y de allá, para fabricar su fe.
      Ahora, todo el mundo habla de fundamentalistas en la Iglesia Católica. Y ¿por qué? Porque niegan la Verdad Revelada. Y a quien sigue esta Verdad lo tildan de fundamentalistas. Es su manera de hablar, su lenguaje. Así atacan. Y no hay que hacerles ningún caso. Sólo hay que darles la verdad como está en el Evangelio.
      Y, entonces, es muy fácil desmontar todo lo que dice. No responda a esta gente con videos, sino con el evangelio, que es lo que usted no hace. Y, claro, cae en la duda, porque no sabe atacar la mentira con la Verdad.
      A un mentiroso se le pone la Verdad como es. Y punto y final.
      Y, entonces, si usted tuviera un poco de fe en la Palabra, enseguida le diría que Cristo ha fundado una Iglesia, no dos o tres iglesias. Y, por tanto, la revelación del ángel gabriel a mahoma fue del demonio, porque le llevó a formar otra iglesia, que no es la de cristo.
      Si usted no comienza por lo sencillo, y la verdad es muy sencilla, después se lía con esta persona. Y no sabe seguir ni argumentar.
      No se dedique a combatir a estos herejes, sino sea fuerte en la fe.
      Sólo existe un Dios: Uno y Trino. Los demás, es el invento de los hombres, que les gusta hablar su lenguaje humano: todos creemos en Dios, por tanto, el dios de los judíos, de los musulmanes, de los budistas, etc. es el mismo. Esto es sólo un lenguaje humano, que le gusta a la masa ignorante. Todo el mundo quiere creer en un dios que no exija una ley divina, una norma de moralidad, unos mandamientos. Todo el mundo quiere creer en un dios que no hable, que no revele nada. Y, por eso, le dicen a usted todas esas estupideces. Y se creen santos y salvados en su lenguaje. Y, para ellos, usted es la condenada, porque no es capaz de aceptar el lenguaje de ellos. Y ellos no quiere someterse a la Verdad Revelada, porque la han anulado en sus cabezas humanas.
      Por tanto, déjelos que bramen. A ¿usted eso que le importa?
      Viva su fe católica, que hoy día nadie la vive. Y deje a los demás en sus monsergas filosóficas.

  8. Marita dice:

    Padre, gracias por explicarnos la cremacion, aunque nunca estuve de acuerdo con ella no le hallaba una explicación.

  9. ana dice:

    Padre La cremacion de los cuerpos no debe hacerse??No lo quiere Dios??perdone la pregunta,pero es que no lo se!gracias como siempre por seguir ayudandonos.

    • josephmaryam dice:

      El fuego destruye lo sagrado.
      Un Rosario bendecido, si se rompe, sigue bendecido; pero si se quema, se quita la bendición.
      El cuerpo es el templo del Espíritu Santo y, por tanto, es sagrado.
      Un hombre santo, su cuerpo, sus huesos, sus vestidos, son sagrados. Si se queman, pierden lo sagrado, lo santo. Y Dios no puede hacer milagros en las cenizas de un cuerpo consumido por el fuego, porque han perdido lo sagrado.
      Dios hace milagros en las cenizas de un cuerpo que se ha corrompido de manera natural. Esas cenizas son sagradas, porque no han pasado por el fuego.
      Por eso, es un sacrilegio la cremación. Hoy día, la Iglesia lo permite y no ha sabido discernir esta sencilla Verdad: el fuego destruye lo sagrado y lo demoníaco. Destruye la obra de Dios y del demonio.
      Por eso, este mundo tiene que pasar por el fuego: hay que destruir la obra del demonio en muchas cosas que ya no pertenecen a Dios.
      Los hombres, en sus cuerpos, son unos demonios, no unos santos.
      Y el Señor, para preservar los huesos santos, producirá un milagro, en que todo será arrebatado, mientras se da el castigo por el fuego.
      Las hostias consagradas no serán aniquiladas por el fuego, porque serán llevadas al Cielo, como todo lo demás santo y sagrado que todavía permanece en la tierra.

    • kaoshispano dice:

      UN FANTOCHE pantalla y mecha de la mafiada DEMOLEDORA progre-masona vaticanal. Pobre judas tocado por demonios sureños del cono Sur. Otro puesto para engañar a tanto perdido y sin fe. Y el Bertone masón de libro Romae, ahora beatificará al JPI, jajaja, ….ellos se los cargan, y ellos se santifican con sus farsas beatficantes para la borregada DEMOLITIO postCVII. THE END .

  10. José Manuel Guerrero dice:

    Judas Bergoglio, como bien lo llama Juan Pablo, se averguenza de Cristo, odia sus enseñanzas y ridiculiza a su Iglesia siempre que puede. Para Bergoglio, en la vida no hay nada sagrado, ni la tierra de un campo santo, ni los abalorios papales, ni la consagrasión en la misa, ni el respeto a los muertos. Esto ùltimo lo demostró robando en un féretro el Santo Rosario de un sacerdote muerto. Solo su culo es para él sagrado. Su culo y su poder. Su desbordante culo de marica de feria representa pictoricamente las ansias de agradar al populacho, de trasquilar sus mentes, de birlarles el alma. Y su poder es el instrumento que necesita y rapiña para hace más eficaz el trabajo que le pide y demanda su amo, Satanás. El falso papa y falso profeta hará lo que sea por hundir a la Iglesia que odia en un lodazal.

  11. Matias Esteban dice:

    En esta fotografía tomada para la fecha en que estas mujeres fueron sepultadas en el Campo Santo, podemos observar como fue profanado el Altar con banderas que hacen apología del terrorismo marxista y ateo, que asolo a nuestra querida Argentina durante la década del 70.

    Observen como Bergoglio, no satisfecho con pisotear la memoria de los católicos que cayeron por defender a la Patria de los enemigos de Dios, va mas allá y ensucia el Templo, tolerando que lo deformen con trapos con leyendas blasfemas.

    Este sujeto odia a Dios y todo aquello que tenga que ver con Él: sea su Iglesia, su liturgia, sus textos, sus dogmas, sus fieles, etc

    Dios y la Santísima Virgen María lo bendigan.

  12. Juan Pablo dice:

    Como nosotros en la Argentina lo conocíamos de antes, nadie más perplejo que nosotros en marzo de 2013. No por nada en el barrio de Flores de Bs. As. muchos ya le llamaban Judas-Bergoglio muchos años antes de 2013….

  13. jose m dice:

    Bergoglio no se entera. Todavía no ha entendido que si no se empieza por la pureza no se conseguirá verdadera humildad. En consecuencia, la obsesión por la pureza (ergo, condenación del preservativo, aborto, anticonceptivos, etc.) no es fruto de mentalidades pacatas, sino de la necesidad de empezar las virtudes cristianas por la base. Sin pureza, todo el edificio se cae. Y no es fácil lograr la purece, pero con la ayuda Divina se tiene que intentar. Y esto es lo grave, Begoglio quiere, con su humanismo, construir la casa por el tejado. Quiere que seamos muy buenos y solidarios, pero dejando a un lado la práctica de las virtudes cristianas interiores (las que no se ven, como, por ejemplo, la pureza).

    Será fuere lo que digo, pero si ser católico fuera lo que dice Begoglio, entonces no puedo serlo. Es superior a mis fuerzas tragarme toda su basura. Me da repelús.

    Una vez más felicito al blogger por este fabuloso artículo. Siga desenmascarnado a este sinvergüenza que, tras su «buenismo» esconde a un tirano positivista (cuales son todos sus «amigos»).

  14. jose m dice:

    Gracias por incansablemente seguir desenmascarando a este hereje. No se canse, pues nos es de suma ayuda a quienes queremos seguir abrazados a la Verdad. Gracias a Lumen Mariae por recordarnos que no se ha de ser un comunista para poder ser católico, pues la Fe está por encima de dichos materialismos.

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